Volver

Fournier cumple 150 Años

Heraclio Fournier, es una de las empresas fundadoras de La Previsora, que hoy es Mutualia, y este año celebra su 150 aniversario, al que nos unimos deseándole que nos siga acompañando durante muchos años más.

En 1870 Heraclio Fournier fundó un pequeño taller de impresión en los bajos de la Plaza Nueva de Vitoria. Su espíritu innovador le llevó a incorporar las últimas técnicas de impresión y ampliar su negocio en un importante emplazamiento en la calle Manuel Iradier. Visionario en su tiempo, tras un comienzo próspero usando métodos de impresión innovadores, en 1877, solicitó a un profesor de la Escuela de Artes y Oficios de Vitoria, D. Emilio Soubrier y al pintor Díaz de Olano, el diseño de una baraja de cartas. Este momento marca un antes y un después en la historia de la compañía ya que esta baraja de cartas es el preludio de los actuales naipes españoles.

Hoy en día, esa baraja sigue fabricándose con éxito y ha sido nombrada como un icono del diseño vasco y español de todos los tiempos, siendo considerados la referencia mundial del naipe. Fournier sigue siendo el fabricante de esa baraja de cartas que tienes en casa, que sale de Legutiano a más de 70 países de todo el mundo. Cada detalle de la baraja de cartas fue creado por maestros artesanos y artistas expertos en técnicas de impresión. Aún hoy sigue siendo así. No en vano, la mayoría de los hogares tienen una baraja de cartas y de entre esos, el 95% es Fournier.

​Cada año salen de la fábrica de Gojain (Álava) nueve millones de barajas hacia diferentes destinos, pero cada una de las cartas pasa por un minucioso control de calidad. «Cualquier defecto puede marcar el naipe y pondría en riesgo el principio del juego limpio», comenta Diego Ruiz de Gauna, director de márketing de Naipes Fournier. La materia prima es un papel de dos capas, exclusivo para las barajas, con una cola negra opaca para que no se transparente y que se conserva en unas condiciones de temperatura y humedad controladas. La impresión debe ser perfecta en cuanto a limpieza, color y tintas, antes de pasar por el barnizado. «Es lo que otorga al naipe el deslizamiento y la durabilidad». Para el corte se utiliza un sistema de visión artificial para lograr cartas totalmente exactas. Cada baraja además es precintada, para demostrar que no ha sido manipulada, antes de enviarla al casino. Fournier es sinónimo de calidad, de servicio, de seguridad y durabilidad, y bajo esos parámetros trabajan para aportar ilusión a las reuniones sociales, métodos de aprendizaje a los niños, seguridad a los casinos y proyección a las empresas bajo el lema 150 Años Jugando Juntos.

Noticias relacionadas