
En el 2015 se celebraron 20 años de la ley de Prevención de Riesgos Laborales. En los primeros años de vigencia de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales el aumento de la siniestralidad fue del orden del 25% (1996 a 2000). Su progresiva implantación favoreció una considerable disminución entre 2001 y 2013. En los últimos años se ha producido un repunte.
Vivimos tiempos de cambio, es el momento de dar un nuevo impulso y replantearse el futuro de la PRL, adaptarse a nuevos riesgos emergentes, aumento de la competitividad, exigencias de flexibilidad, disminución de plazos (riesgos psicosociales), aumento progresivo de los trastornos musculoesqueléticos, aparición de nuevos riesgos asociados a nuevas tecnologías (nanopartículas, nuevas sustancias, Big Data, robótica colaborativa, etc.).
Manuel Antonio Rodriguez Perez En el “ojo” de Valencia
