
Beneficios físicos y psicológicos
El deporte de la hípica está muy introducido entre nosotros y la Federación Vasca organiza muchos y, sobre todo, importantes campeonatos. Desde esta sección mensual de la Unión de Federaciones Deportivas Vascas-Euskal Kirol Federazioen Batasuna, queremos trasladar las ventajas de una modalidad más que atractiva y al alza. Y es que subirse a lomos de un caballo y disfrutar de un paseo supone una actividad que ofrece diversión, superación personal y también ayuda, cómo no, a mantenerse en forma. La equitación es un deporte que traslada grandes beneficios físicos Uno de los elementos diferenciadores de este deporte frente a otras disciplinas es la interacción con el caballo. Además, la equitación presenta ventajas sobre el cuerpo de jinetes y amazonas que lo practican, ya que posibilita la mejora del equilibrio vertical y horizontal. El tronco se mantiene erguido, lo que influye para favorecer el control de la postura y ayuda a corregirla. También regula el tono muscular y, además, el hecho de que el caballo tenga una temperatura mayor a la del ser humano favorece la circulación sanguínea. Practicar equitación disminuye los músculos contraídos y, al tener que estar alerta ante posibles alteraciones del ritmo por parte del caballo, se favorecen la coordinación motriz, los reflejos y la planificación motora. Aunque para algunas personas la hípica no supone un gran esfuerzo físico, es un deporte muy completo que permite desarrollar la musculatura, principalmente de las piernas y los glúteos, además de la espalda y abdominales. Y ayuda a mejorar el equilibrio y el sentido de la orientación. Junto a estos beneficios físicos, la equitación es importante en la socialización del niño ya que fomenta su confianza y seguridad en sí mismo, mejorando la capacidad de concentración y de disciplina. Además, se consigue que los niños y niñas adquieran muchos de los valores y actitudes fundamentales del día a día, que los harán mejores ante los obstáculos cotidianos. Aquí se habla de responsabilidad, liderazgo, respeto por los animales y la naturaleza, igualdad, cooperación, rectitud, constancia, disciplina, autocontrol, compañerismo y esfuerzo. Cuando aprenden a gestionar sus errores, con el deporte, con educación y con buenos hábitos diarios, se logra que los más pequeños sean cada día un poco mejores. Montar a caballo es una actividad fenomenal para los niños y niñas, ya que los caballos y ellos tienen una relación mutua especial. Aprenden así a conocer, a cuidar y a respetar a estos animales. Y, sobre todo, disfrutan de un deporte, sano y divertido al mismo tiempo. La equitación tiene diversas disciplinas: salto, doma clásica, concurso completo, raid… Desde estas líneas reforzamos que los aspectos positivos de la equitación van más allá de lo físico, ya que al estar en contacto con el caballo se favorece la confianza, el autocontrol de las emociones y mejora la autoestima. También incide en la concentración, en la capacidad de atención y repercute de forma positiva en la memoria. Que el animal esté bajo nuestro control ayuda a una mejora en la capacidad de atención y proyecta sentimientos como el respeto y la responsabilidad. Montar a caballo favorece la ubicación en el espacio y en el tiempo. Todo esto convierte a la hípica en un deporte completo e ideal para todos.
Al solicitar la Licencia Federativa o Tarjeta Deportiva de la Federación Vasca de Hípica, los jinetes y amazonas obtienen una serie de ventajas, además del seguro deportivo y acceso a competición oficial (en el caso de las Licencias Federativas de competidor). Estas ventajas consisten en el acceso gratuito a cursos y clinics, seguros, información y diversos acuerdos a los que la Federación Vasca de Hípica ha llegado con distintas empresas o comercios, en los que presentando la Licencia o Tarjeta Deportiva se obtienen importantes descuentos. (www.fvh.org).
