
Entrevistamos a Maria José Sevilla, ergónoma del Instituto Sindical de Trabajo, Ambiente y Salud (ISTAS), que participará en la jornada organizada por Mutualia el 22 de Febrero “Transtornos Musculo Esqueléticos, un paso más allá de la valoración ergonómica”.
Personal Investigador, técnico y responsables empresariales reivindican la ergonomía participativa como una alternativa efectiva e innovadora para reducir los trastornos musculoesqueléticos de origen laboral. Esta estrategia preventiva, en auge en Estados Unidos y Canadá, ha demostrado que da buenos resultados, tanto en la mejora de la salud de trabajadoras y trabajadores como en la productividad de las empresas. En los últimos años, ISTAS junto al Instituto de Biomecánica de Valencia (IBV), el Instituto Valenciano de Seguridad y Salud en el Trabajo (INVASSAT), el Servicio de Prevención UNIMAT y profesionales en prevención de Comisiones Obreras, han estado trabajando en el desarrollo de un procedimiento de ergonomía participativa para la prevención del riesgo ergonómico de origen laboral, denominado Método ERGOPAR.
1- ¿Que es la Ergonomía participativa?
No existe en la literatura una única definición de Ergonomía Participativa. Muchas y muchos autores han publicado su percepción y punto de vista en revistas científicas y especializadas. Los términos que vienen repitiéndose en las distintas definiciones son participación, trabajadores, conocimientos, procedimientos, apoyo, mejora, actores, soluciones, implicar e influir. Estas palabras clave nos permiten unificar el enfoque y la manera de hacer que persigue la ergonomía participativa. Así, desde ISTAS entendemos la ergonomía participativa como una estrategia para la mejora de las condiciones de trabajo a nivel ergonómico, estructurada y ordenada por medio de un procedimiento que incorpora la participación activa de agentes implicados.
2- ¿Cómo ha sido el desarrollo de un procedimiento como ERGOPAR?
Ha sido un trabajo muy laborioso y exigente, en el que la participación ha sido la pieza clave en su desarrollo. Desde 2008, iniciamos en ISTAS la revisión bibliográfica sobre ergonomía participativa y desde entonces, hemos contado con la participación directa de distintas organizaciones públicas, privadas y sindicales. El primer borrador del manual del método lo redactamos en 2009 y en ese mismo año, validamos junto con la Universidad de Alicante, el cuestionario de identificación de factores de riesgo ergonómicos y daños que incorpora. Entre 2010 y 2011, validamos el Método ERGOPAR por medio de un proyecto piloto en 5 empresas de la Comunidad Valenciana. Este proceso de validación fue muy intenso y exigió mucha dedicación y esfuerzo por parte de los Grupos Ergo creados en cada empresa, y del equipo formado por profesionales de ISTAS, IBV, INVASSAT, UNIMAT Prevención y el Gabinete de Salud Laboral de CCOO-PV.
La primera versión del Manual del Método ERGOPAR la publicamos a finales de 2011 con la financiación del Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSHT). En la actualidad, disponemos de la versión 2.0, cuyos cambios también han sido consensuados y validados por las entidades participantes. En definitiva, mucho trabajo en equipo y muy buenos resultados.
3- ¿Cómo ayuda disponer de una metodología testada a conseguir unos resultados efectivos?
ERGOPAR ofrece de forma clara y ordenada los pasos a seguir en el desarrollo de una experiencia participativa, cuyo objetivo es lograr mediante la participación, la mejora continua de las condiciones de trabajo a nivel ergonómico. Sin embargo, no tiene una varita mágica. El éxito de la experiencia depende de muchos factores. Si existe un contexto adecuado en la empresa y las condiciones de éxito del método están presentes durante la experiencia, la empresa contará con los suficientes factores favorecedores para lograr mejoras a nivel ergonómico. Sin embargo, intentar aplicar ERGOPAR por ejemplo, sin dotar a las y los participantes de tiempo para desarrollar las tareas, de capacidad de decisión y autonomía, de recursos económicos para la ejecución de medidas, etc. es un obstáculo evidente cuando hablamos de ergonomía participativa y los resultados no serán satisfactorios.
4- ¿A qué tipo de empresas puede dirigirse?
Es aplicable a todas las empresas, a todos los puestos de trabajo y sectores de actividad. ERGOPAR es un método flexible y adaptable a cualquier contexto. Aunque sí destacamos como condición de éxito de la experiencia y garantía de participación, la existencia en la empresa de representantes de los y las trabajadoras.
5- ¿Cómo se pueden medir los resultados de las medidas implantadas?, tanto desde el punto de vista de la mejorar la salud de las y los trabajadoras, como de productividad.
ERGOPAR permite valorar los resultados de las medidas desde ambos puntos de vista. Por un lado, incorpora herramientas y técnicas participativas dirigidas a las y los trabajadores afectados por la medida implantada en el puesto, que permiten evaluar su eficacia frente al riesgo ergonómico. Además, indicadores como el registro de accidentes de trabajo por sobreesfuerzos y enfermedades profesionales musculoesqueléticas, pueden permitir comparar “el antes y el después”. Incluso, el método propone distribuir pasado un tiempo, el cuestionario de identificación de factores de riesgo ergonómicos y daños, con el fin de valorar periódicamente la exposición de las y los trabajadores. Por otra parte, será necesario que la empresa valoré la rentabilidad económica de la experiencia participativa en la empresa (coste de la acción) y para ello, ERGOPAR propone cuantificar económicamente –pasado un tiempo prudencial- la eficacia de las medidas implantadas y su repercusión y rentabilidad.
6- ¿Cuales podrían ser las conclusiones que se pueden extraer tras el análisis de la experiencia en diferentes empresas?
De los resultados en las experiencias con ERGOPAR en las que ISTAS ha participado directamente, hemos podido extraer conclusiones comunes respecto a los beneficios obtenidos. Destacaríamos los siguientes:
– La mejora de los procesos de participación, comunicación e información en la empresa.
– La mejora de las condiciones de trabajo a nivel ergonómico.
– La disminución de las molestias físicas relacionadas con el trabajo.
– El aumento de interés de los y las trabajadoras y la dirección por la prevención de riesgos laborales, así como en sus conocimientos en ergonomía.
– La mejora de las relaciones laborales y el fomento de la integración de la actividad preventiva. Crea cultura preventiva.
– La reducción de los costes económicos por casos de incapacidad temporal.
– La mayor motivación y satisfacción de los trabajadores y trabajadoras de los puestos analizados.
– La mejora de la productividad.
– Los beneficios económicos por encima de los costes de la experiencia.
7- ¿Cuáles son vuestros retos para el futuro?
Nuestro reto es que cada día más, las empresas, los Comités de Seguridad y Salud y las y los profesionales en prevención de riesgos laborales apuesten por la ergonomía participativa y por ERGOPAR. Su uso, sin duda mejorará la salud de los trabajadores y trabajadoras y facilitará los cauces de comunicación y participación en las empresas. A día de hoy, estamos pendientes de la publicación de la Nota Técnica Preventiva del INSHT sobre el Método ERGOPAR que sin duda, supondrá un reconocimiento a nivel técnico y potenciará su difusión y su aplicación en las empresas. Seguiremos difundiendo resultados en publicaciones y artículos, en jornadas, cursos, seminarios, nuestra web… y aprendiendo de los distintos puntos de vista que nos brinda cada experiencia participativa.
Podéis ampliar la información sobre este interesante tema, inscribiéndoos en la Jornada Técnica, del próximo 22 de Febrero, “Trastornos Musculo Esqueléticos, un paso más allá de la valoración ergonómica”.
